Comentarios

¡Hola a todos!

El día, tarde, noche de hoy he querido traerles una reflexión acerca de los comentarios. ¿Por qué sobre los comentarios? sencillamente porque en las últimas semanas he observado en varias historias, publicaciones y mensajes mencionar a los escritores la importancia que éstos tienen para ellos, ya que es la remuneración por su trabajo al escribir las historias que tanto nos hacen soñar despiertos. La verdad no les quito razón, es lindo recibir comentarios en el proceso de escribir, te inspira, te motiva y te causa una gran felicidad que de tus escritos salgan tales palabras del lector. Pero hace falta aclarar que no todos los comentarios causan estas gratificaciones, existen unos que son neutrales, otros vacíos, algunas destructivos y los mejores de todos, a mí parecer, los que alaban tus escritos incluyendo detalles de la historia misma. Por eso hoy he querido hablar acerca de los tipos de comentarios y como ellos son interpretados por parte del escritor.

Antes de hablar sobre los tipos de comentarios quisiera contar... no sé si llamarlo anécdota, relato o simplemente mi opinión acerca de una vivencia. Creo que lo dejaré entre vivencia-opinión. Bien, quisiera contar una vivencia-opinión desde el punto de vista de la persona que escribe, iniciando el tema con la pregunta más sencilla e "inocente" que existe: (aclaro que esto no se aleja del tema central, que son los comentarios) ¿Para quién se escribe? 

En mis inicios en la escritura creía con una fe ciega que se escribía para uno mismo, siempre y cuando uno quedará satisfecho poco importaba la opinión de los demás, si eso era cierto entonces ¿Por qué se sentía la desazón al escribir sin que nadie leyera o dijera algo? Una amiga, inconscientemente, me dio la respuesta: "No creo en esa gente que dice que escribe para sí mismo. Uno escribe porque quiere estar. Y quiere estar más allá de sus propios confines" 

Desde ese momento  he pensado en ello. Era lógico pensar que si se publicaban los escritos por la red era porque se esperaba que alguien leyera, querer llegar a otros lugares, a otras mentes, a otras culturas, a otros corazones. Conocer la opinión del lector, crecer junto con ellos, mejorar y superarse con cada historia. Siempre se necesita del factor "lector" al escribir.

En el libro de Stephen King "Mientras escribo", él mismo dice que el escritor necesita del lector ideal, esa persona que con sus opiniones y apoyo te ayudan a desarrollarte en el mundo de la escritura, pero no siempre es sencillo encontrarlo. Él tuvo la dicha de casarse con su lectora ideal, Tabitha King; gracias a sus opiniones el gran maestro del terror pudo crecer y desarrollarse en este mundo. En resumen, para el escritor es de suma importancia la opinión, los comentarios. No son capricho, no son competencias de "yo tengo más comentarios que tú". Ellos son el impulso, la motivación, la guía para que el escritor se desarrolle con el pasar de los años.

Pero, como dije en líneas anteriores, no todos los comentarios que se leen están orientados para ese fin, por eso ahora hablaré sobre los tipos de comentarios, catalogados por mi muy sincera opinión personal y sin ninguna otra investigación que la experiencia que he tenido por mi propia cuenta de hechos que he visto y vivido, en algunos casos.

Tipos de comentarios

Comentarios neutros: Aquellos que no dicen nada de provecho acerca del texto. Al hablar de "provecho" me refiero a que no aportan nada sobre una mejoría en la escritura o una opinión detallada del escrito. Varios de éstos los he visto como:

"Síguela, me gusta como va :D"

"Cuando la continuas? Me encanta"

Si bien estos comentarios motivan a seguir porque se siente una responsabilidad con el lector, dejan un sabor agridulce por conocer algo más de esa persona, una opinión algo más explícita acerca de lo que se leyó.

Comentarios vacíos: Estos comentarios son muy parecidos al anterior, con la diferencia que el lector ni se toma la molestia de expresar qué le pareció, para él está implícito en la palabra o frase extremadamente corta que da:

"Síguela"

"Continúa"

"Seguiré leyendo"

Con respecto a estos primeros tipos de comentarios diría que están bien en los inicios cuando se publica la primera y sólo la primera historia, por mi parte hasta los primeros dos o tres capítulos son aceptables, luego de ello se tornan monótonos, vacíos, indiferentes.

Los siguientes tipos de comentarios son los que más afectan al escritor, bien sea de forma positiva o negativa.

Comentarios destructivos: Aquellos que sin argumentos insultan la obra, insultan al escritor, insultan el país de origen del escritor e incluso la pc, pluma, lápiz, portaminas conque se escribe.

Personas que dejan esta clase de comentarios, he visto que son llamados trolls, frustrados u ociosos. Me inclino hacia la ociosidad para dejar este tipo de comentarios que en nada ayudan excepto desperdiciar espacio en la red. Creo que no es necesario colocar un ejemplo de ellos.

Recibir estos comentarios en los inicios es un golpe duro para el escritor. El escritor se encuentra lleno de expectativas, ilusiones y temor, sí, temor. Se siente el temor porque el esfuerzo que se hace sea del agrado de alguien. Es una lucha interna entre ese miedo y la seguridad que se tiene el escritor mismo. Un comentario destructivo es fatal, algunos se repondrán en un tiempo más largo que otros, pero hay quienes quedan marcados por ello lamentablemente.

Cuando se reciban este tipo de comentarios que no aportan más que una bomba cargada de insultos, recomiendo seguir de largo e ignorar el asunto. En caso de verse afectados, reponerse de ello. Una frase que me gusta mucho usar cuando las cosas se ponen duras ilustra mejor lo que quiero decir: "Caer está permitido, levantarse es obligatorio".

Comentarios críticos: Estos son los verdaderos comentarios que ayudan al escritor. Esa ayuda puede llegar de forma brusca, carente de tacto, incluso algo odiosa que te hace sentir imbécil. Claro que puede ser todo lo contrario, puede venir alegre, sutil y decir las cosas poco a poco. Estos comentarios críticos, como lo dice la palabra son una crítica de la obra, desde la personalidad de los personajes, su profundidad, su realismo, hasta la redacción, trama o giros creíbles que tenga la historia.

A muchos les cae pesado recibirlos, pero éstos son los comentarios que la verdad ayudan a mejorar y desarrollar el escritor que recién inicia. Hay que aprender a sobrellevar la relación amor-odio que se siente al encontrar a estos maravillosos lectores.

No todos los comentarios críticos son tan intensos y detallados, algunos lo son más que otros, pero sin duda son los comentarios deseados a la hora de mejorar en el mundo de la literatura.

Comentarios halagadores: Son los contrarios a los destructivos. Estos lectores aman al escritor, aman la obra, aman la mano que teclea o sostiene la pluma que crean las líneas de la obra, aman el país de origen de la persona, aman a la madre que lo trajo al mundo. De acuerdo, exageré lo último, pero ya se hacen a la idea de lo que quiero decir.

Los comentarios halagadores son maravillosos. Que te los dejen en tus inicios, en el desarrollo y en el final de la historia no afecta en nada a la sonrisa que deja grabada cada vez que el escritor se encuentra con ellos. Impulsa a escribir, motivan a ser constante con las actualizaciones, incluso inspiran para llegar más lejos con la historia. Empezar a darle publicidad, que más personas conozcan el gran talento que tienen, porque lo especial de los comentarios halagadores es que son detallados en trama, personajes, giros de la historia, hasta preguntas de cómo surgió todo. Si bien no son objetivos, para nada objetivos, pienso que aportan su grano de arena en ayudar al escritor a querer llegar más lejos, superarse a sí mismo para ofrecer algo de mayor calidad a las personas que leen.

Confieso que estoy dentro de los comentarios halagadores, me cuesta ser objetiva al estar en frente de una historia que me gusta, detallo tanto como puedo de ella y lo que me hizo sentir, allí tengo una relación de amor-odio con el escritor de la historia. Sé que no cumplo con el objetivo de los comentarios y por ello trato de ser objetiva (últimamente, claro); pero aún se me hace difícil no dar mi verdadera opinión al escritor de cómo me hizo sentir con cada capítulo.

En definitiva, para dar final a esta larga entrada, los comentarios son de vital importancia para el escritor, conocer la opinión del lector es de gran ayuda en los inicios del proceso de escritura, así que no duden en dejar su comentario en las historias que lean. Ayudan a formar un nuevo escritor en este mundo de letras tan mágico.

La quimera. Portada alternativa

¡Hola a todos!
Acá les traigo una de las tantas portadas que hice para esta historia, no sabía cuál elegir así que le pregunté a Ger (un amigo) cuál debería usar. En su muy humilde y honesta opinión, demasiada honesta a mi parecer, me recomendó que la que no tenía personas, así le daba la oportunidad a ustedes de colocarles rostro antes que yo les impusiera una imagen de los personajes de la historia. Ahora, como ya la historia va por el 3er cap. (actualizaré en unos minutos) me dije: ¿por qué no mostrarles una de las otras portadas que los incluía?
Así que les presento a los protagonistas de la quimera en primera plana:

Antes

Después

¿Qué les parece?, ¿Les gusta como portada o prefieren la actual que posee la historia?

La quimera

Hola a todos!!
Discúlpenme por la gran ausencia. Me he alejado mucho de todo lamentablemente. Etapas finales de la universidad. Pero ya estoy de regreso, y qué mejor regreso que con una nueva historia!
Acá les presento un nuevo proyecto en el que he estado trabajando en los escasos ratos libres. Con todos ustedes...

La quimera

Una vida tranquila y sencilla, ése era el sueño ideal de Ed. Un lugar donde pudiera vivir sin preocupaciones, sin estrés. Un lugar donde pudiera alejarse de todos y de todo. Después de mucho tiempo, Ed podía respirar satisfecho por haber dado con el lugar y empezar a disfrutar de su sueño hecho realidad.

Pero debió recordar que los sueños en algún momento deben terminar.La aparición de aquella chica le hizo volver a la tierra y recordar todo lo que quiso dejar atrás. Porque por mucho que se luche, por mucho que se desee huir, el pasado siempre está ahí, esperando a que te des vuelta.

La pueden encontrar en Wattpad:

La quimera

Y también en Fictionpress:

La quimera

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Espero les haya interesado y aún queden algunos por allí porque próximamente vienen más entradas interesantes por colgarse :D

Se me cuidan mucho. Nos estamos viendo <3 

Desahogo por Cisley Rose

Y aquí con unas ganas enormes de escribirte y no poder hacerlo.

De volver a tenerte en estos momentos de dolor y angustia.

De enajenación de mi persona, porque sólo ahora he descubierto que no me pertenezco. Que mi corazón ya no está en mi pecho, que mi alma ya no está en mi cuerpo, que mis pensamientos desaparecieron de mi mente. Si sé bien que fui yo la que se marchó, eso no quita que mis pies anden sobre espinas, que la sangre derramada sea inferior a las lágrimas que desbordan mis ojos y que los gritos del alma atormenten mis oídos.

Por más que quiera no puedo olvidarte, sólo me queda que el tiempo pase para aprender a sobrevivir sobre estas espinas que se ven a lo largo del horizonte. Que la oscuridad que ahora cae se cierna completamente que hasta me impida ver el recuerdo de tu voz, de tu rostro, pero más importante aún. Que me impida volver a tu recuerdo.

En otras palabras, estoy en la espera que el tiempo pase hasta convertirme en un cuerpo vacío, porque esa es la única forma de transitar el camino que he elegido.

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Una pequeña aclaratoria. Esto no es un poema como tal, sólo necesitaba un medio para desahogar este sentimiento que literalmente me está matando, y el blog fue lo primero que se me vino a la mente. Perdonen las molestias por ello. 

Héroes del siglo XXI

Héroes del siglo XXI

¿Alguna vez han sentido que todo se desmorona en un segundo?, ¿Qué la vida se les va y no hay nada que puedan hacer para remediarlo?

No tiene que ser una situación trágica, como alguna muerte, la pérdida de beca o el abandono o infidelidad de la pareja. No se tiene que pensar precisamente en ello, ¿Qué hay de las cosas pequeñas que conforman nuestro ser? Una colección única de libros antiguos, una recopilación de las mejores canciones que ya no se consiguen en la actualidad, o todos los escritos que se hacen a lo largo de los años.

Hace unos días me tocó vivir el último ejemplo. Se me bajó la tensión, tuve un momento en donde la mente estuvo en blanco, para que luego sólo funcionara para formular palabrotas, que no mencionaré para protegerme de las demandas de los padres por corromper las frágiles mentes de sus niños (así sean mayores de edad. Se han visto casos de casos).

Como algunos lectores sabrán, específicamente los de “Corazones conectados”, me he tardado para actualizar debido a la cantidad excesiva y desconsiderada de trabajos que dejan los profesores, como si su materia fuera la única que se viera. Debido a ello mi pendrive, el dispositivo sagrado que contiene mis historias, trabajos de la universidad, fotos, en resumen TODO; ha sido utilizado últimamente sólo para la universidad, para poder imprimir los trabajos y entregarlos a tiempo. Fue en uno de esos días, de estudiante responsable y trabajadora (ignorando que el trabajo lo imprimía diez minutos antes de clase), donde fui a un lugar dentro de la universidad (DENTRO, que es el colmo) para que me imprimieran el trabajo. Todo resultó bien, sin ningún inconveniente o al menos eso creía. Los días pasaron y seguí con mi nula vida social (la universidad es una desgraciada). No me di cuenta de la gran verdad, de la pesadilla que me envolvía, del horror que me rodeó hasta que conecté de nuevo el pendrive a la pc para transferirle otros documentos y volverlos a imprimir al día siguiente, el típico ciclo estudiantil. Al conectarlo, lo vi. Mi pendrive, mi hermoso pendrive estaba vacío. NADA, no había nada en él, ni una sola carpeta. Noches sin dormir por escribir, arduas horas de trabajo de edición, días de dibujo y sombreado. CUATRO años desaparecidos así sin más.

¿Hace falta mencionar con detalle el abismo donde caí? No lo creo. Los lectores y escritores podrán darse una idea de lo sucedido.

¿Lo peor? No había nada que hacer. Todo se esfumó, no tenía forma ni manera de recuperar el contenido, no completo y en su forma original, ya que tanto los cuentos e historias que publico en las páginas de fics tienen errores, como algunos se habrán dado cuenta, y otros no poseen agregados que sí se encuentran en los originales. ¿La razón? Primera, publico apenas termino de escribir, la edición sólo la realizo al terminar la historia completa, así puedo enfocarme más en la redacción y ortografía (el primero aún lo estoy trabajando). Segundo, por el plagio, no es mucho lo que se puede hacer referente a eso, he visto casos de casos donde esas personas con todo el descaro del mundo se apropian de la historia, pero es un riesgo que se corre al publicar por ese medio, consciente estoy de ello. Así que si quieren mi historia, esfuércense al menos en corregir esos detalles (triste, lo sé).

Ok, nos hemos desviado un poco, aunque no tanto. Retomemos donde lo dejamos.

Todo se perdió y ni forma ni manera de recuperarlo intacto, de nuevo a empezar de cero o siendo un poco justos, con una recuperación del 10%.

Desesperada, frustrada, dolida, deprimida y molesta. Le conté de todo esto a un amigo, donde prácticamente le hice un testamento del hecho. ¿Saben qué hizo? Me preguntó detalles y se puso manos a la obra para averiguar lo que había sucedido.

Hasta entonces pensé que se trataba de un formateo, me contaron una vez que si sacabas un pendrive de forma segura existían posibilidades que el dispositivo se formateara. Me ahorraré las líneas donde me tomó el pelo por mi confusión e ingenuidad, porque el problema real fue… ¿Lo adivinan? Les doy unas líneas para que adivinen. Sin trampas ¿Eh?

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UN VIRUS

Mi pendrive agarró un virus en esa pc infernal. Ger, el amigo que descubrió el verdadero problema, se encargó de todo. En cuestión de minutos (sin mentir) solucionó el problema. Sí, recuperó toda mi vida en los mismos minutos, quizás más (bueno, fueron más, lo admito). De tanta felicidad no dejaba de preguntarle:

¿De verdad está todo bien?

¿Se encuentra todo allí?

A lo que continuamente me respondía:

Sí, todo arreglado. Ahora ten más cuidado y resguarda tus cosas, por Dios.

Lo sé, mi querido salvador es muy expresivo. Aun así sus palabras no disminuyeron mi agradecimiento. Amé a ese hombre. Recuperó todo ¡Todo!

Ahora, de todo esto, me gustaría sacar dos reflexiones, podrían verse de esa manera.

1-      Siempre, SIEMPRE resguarden sus cosas en internet. Puede ser por Dropbox, la nube, su correo (aún se corre el riesgo del hackeo). Existen muchos lugares donde resguardar la información. Tampoco descarten el pendrive, es una buena forma de tener siempre la información cerca, pero cuidando las pcs donde lo conectan; también tienen los cds, aunque no sé por cuanto tiempo sigan vigentes.

No esperen a que en un descuido mínimo se desvanezcan todos sus esfuerzos de días, semanas, meses u años.

2-      Con la ayuda de Ger, en fanfic.es es conocido como Gerback, me di cuenta de algo que ya lo he mencionado muchas veces en párrafos anteriores. Él fue mi salvador, mi ángel, mi héroe. Fue la persona que me ayudó en un momento de apuro, de necesidad. Fue la luz en medio de la desesperación y discúlpenme si lo adorno demasiado, es para hacerme entender.

Los héroes, son personas con poderes sobrenaturales producto de algún accidente químico o de radioactividad, que, según su concepción, pueden ayudar a la humanidad o destruirla, donde, en el segundo caso, de héroes pasan a ser villanos.

Los ángeles son seres que no pertenecen al mundo terrenal, pero que, con sus poderes divinos, nos ayudan y nos protegen de los males.  

¿Me pregunté esos héroes ficticios plasmados en historietas, películas e historias; esos ángeles con fábulas y metáforas estarán en un plano tan lejano?

Pienso que no. Pienso que todos podemos ser héroes, dejemos de lado a los ángeles por su connotación religiosa. Los héroes pueden ser personas que conocemos o que desconocemos, personalmente hablando, ya que lo más probable es que conozcamos como los llaman. Por ejemplo los bomberos ¿Cuántas vidas no salvan arriesgando la suya propia? Los doctores. Policías (algunos, lo reconozco). Todos ellos son héroes.

La persona que salvó al niño a punto de ser atropellado. El amigo que te ayudó a última hora con el trabajo, incluso proyecto de tesis. El profesor que te motivó a irte por alguna carrera. El escritor, que con su libro, te impulsó a crear algo igual de valioso y te llevó al éxito. En alguna medida, todos son héroes, por eso decidí llamar a esta entrada héroes del siglo XXI. De este suceso, con final feliz, gracias a Dios, salieron dos bonitas reflexiones.

Piensen ustedes quiénes han sido sus héroes o si ustedes en algún momento fueron el héroe o heroína de alguien.